1/12/17

KALIMA & SOLFATARA


Este grupo surge como tal en marzo de 2012, producto de la fusión de dos proyectos musicales cuando el cantante ceutí Nacho Álvarez, que venía actuando bajo el nombre de Kalima desde 1989, decide unirse con Rubén Díaz, guitarrista, productor, arreglista y compositor tinerfeño, Y que, desde el año 2000, se había abierto también un importante hueco en el panorama musical canario como Solfatara.

Pues anoche, y después de algunos años alejado del panorama cultural isleño, me decidí a asistir en compañía de Maki, mi mujer, al concierto que, como presentación en Santa Cruz de Tenerife de su último disco, "Una crónica de amor y otros desatinos", en su actual línea de mestizaje musical, ofrecieron en la sede de la Fundación CajaCanarias. 


Quedé gratamente sorprendido, ya que, hubo temas que me encantaron, pero aparte de la magnífica voz de Nacho Álvarez y la excelente actuación grupal, quiero enfatizar las aportaciones de Antonio Lorenzo (violín) y Esteban Ledesma (bajo)… ¡Impresionantes!

Por poner una pega, diré que a mis pobres oídos los sobrepasó el alto nivel de decibelios, pero supongo que serán cosas de la edad.
 
Nacho Álvarez

Fue una verdadera sorpresa encontrarme allí a mi vecina, Magdalena Ojeda* cuya hija, Masángeles Iceta, formaba parte del espectáculo musical como integrante de los coros de K&S, algo que yo desconocía.

Al finalizar la actuación no pude acercarme a saludar a Rubén, a quien conozco personalmente desde hace bastantes años, y de quién, aunque no nos veamos muy a menudo, sigo la trayectoria artística con detenimiento; y es que, aparte de por los medios de comunicación, siempre me llegan referencias suyas a través de los amigos en común que aún nos quedan.

Rubén Díaz

Atendiendo a mi oficio de palabrero (no sé si por deformación profesional o por puñetero que soy) no puedo acabar esta entrada sin ahondar en las palabras que conforman el título de la banda: 

Kalima


Aunque muchos tiendan a pensar que tal palabra, escrita con “ka”, es una corrupción de calima, lo cierto es que nada tiene que ver con ella más allá de su similitud fonética. De hecho si la buscan en el Diccionario de la Lengua de la Real Academia Española, verán que no figura, sencillamente porque proviene del término árabe كلمة kalimah”, cuyo significado viene a ser palabra.

Por contra, la calima es un fenómeno meteorológico que aquí, en Canarias, forma extensas nubes de polvo en suspensión que, arrastradas por el viento dominante o siroco, proveniente de los desiertos africanos del Sahara y del Sahel, nublan los cielos isleños con un típico color amarillento, que dificulta bastante la visibilidad. De hecho, los antiguos romanos identificaban la palabra calima con oscuridad.


No sé bien cuándo dejamos los canarios de decir calina (de niño, este era el vocablo que siempre escuché en boca de los mayores) para decir calima; pero según el Diccionario de la Lengua de la Real Academia Española, ambas palabras son correctas.

calima
De calina, infl. por bruma.
1. f. Accidente atmosférico consistente en partículas de polvo o arena en suspensión, cuya densidad dificulta la visibilidad.
Real Academia Española © Todos los derechos reservados


Solfatara:

Es palabra esta que no admite ningún tipo de discusión, en cuanto que tiene un único y específico significado, tal y como detalla la Docta Casa:


solfatara
Del it. solfatara.
1. f. En los terrenos volcánicos, abertura por donde salen, a diversos intervalos, vapores sulfurosos.
Real Academia Española © Todos los derechos reservados

No obstante quiero hacer una puntualización: Dicha palabra proviene del latín Sulpha terra, “tierra de azufre” y se aplica, por extensión, a los depósitos de dicho elemento químico, resultantes de gaseosas efusiones volcánicas de ácido sulfhídrico.


Les apunto también, a título de curiosidad, que el volcán o padre guardián de este archipiélago atlántico-africano: Teide o Echeyde (nombre dado por los antiguos pobladores guanches de Tenerife) se encuentra en la actualidad en fase de solfatara… ¡y que dure!


(*) Prima de mi entrañable compañera laboral y amiga, fallecida tiempo atrás, la carismática Electra Ojeda García, quien fuera, durante tantos años, encargada de la centralita telefónica del Puerto de la Cruz. 

Miguel Ángel G. Yanes

No hay comentarios:

Publicar un comentario